EL Karité

El karité es u árbol de hasta 15 metros de altura de las sabanas arbóreas del oeste de África. El nombre del Karité significa árbol de mantequilla. Este árbol puede vivir hasta tres siglos y el diámetro del tronco puede medir hasta un metro.

Tradicionalmente en África del Oeste, sus frutos se llaman nueces, estos frutos son drupas canosas con una almendra de cáscara fina. Se obtiene, trás ebullición y triturado de estas almendras, una grasa vegetal llamada manteca de Karité. Esta sustancia es comestible y utilizada tradicionalmente en la cocina local, también se utiliza en la industria chocolatera como sustituto de la manteca de cacao.

Manteca de Karité

El uso continuado de Manteca de Karité nos asegura los efectos preventivos para combatir el envejecimiento de la piel. La manteca de Karité actúa recubriendo la piel con una película invisible que evita la deshidratación y la protege de las agresiones externas, como el sol, el viento o los cambios bruscos de temperatura. Es muy eficiente en la regeneración de la piel, calma las pieles irritadas, es el más efectivo de los antienvejecimientos que existen en la naturaleza.

La manteca de Karité es muy útil para tratar los labios resecos por el frio, a los que aporta un brillo natural, también para la nariz irritada por las alergias o los resfriados. Podemos utilizarla para dar a nuestra piel un efecto satinado, terso, hidratado y suave.

El embarazo y la lactancia

Durante el embarazo previene la aparición y la formación de estrías. Durante la lactancia previene la formación de grietas en el pecho y protege al bebé de enrojecimientos de la piel por la fricción de los pañales, pudiendo aplicar cuantas veces sea necesario.

Para pieles muy delicadas.

Destaca por su intenso y duradero poder hidratante sobre el rostro y el cuerpo. Mejora la elasticidad de la piel por sus propiedades nutritivas y su alto contenido en Vitamina F, componente vital de las membranas celulares.

Es un anti – irritante por excelencia, lo que convendría a las pieles que se enrojecen con facilidad, con tendencia alérgica.

El cuidado del cabello.

Protege el cabello del daño solar, al ejercer un efecto protector y regenerador de este, restaurando la estructura capilar, aportando brillo, suavidad y volumen.

En verano la manteca de Karité, funciona como un protector solar, otorgando un bronceado de larga duración.