Hamamelis

Esta planta originaria de América del Norte, es muy popular en la medicina indígena, los indios nativos la utilizan mucho, sobre todo para las diarreas y hemorragias, tanto internas como externas.

Entre sus principios activos encontramos, taninos, flavonoides, saponinos amargos, colina, acido gálico, que hacen del hamaelis una planta antihemorrágica, astringente, antiinflamatoria, emoliente, antioxidante y desinfectante.

Es de gran uso en hemorragias, internas y externas, sobre todo para las de las encías. De esta planta se utiliza las hojas y la corteza, muy rica en silicio, nos ayuda a evitar la hemorragia y va ayudando a regenerar la encía.

En cosmética se utiliza sobre todo contra el acné, ya que es muy astringente, pero al mismo tiempo no deja la cara reseca ni tirante, cierra el poro, desinfecta, deja la piel calmada y desinflamada, como tónico en los tratamientos para el acné es uno de los mejores.

Luego tenemos cremas en el mercado con extracto de hamamelis, para piernas con varices o con problemas de circulación, es antiinflamatoria y antihemorrágica, le proporciona a la pierna descanso y fluidez a la circulación. Siendo una gran aliada en personas que tienen mucho problema de circulación y les duelen mucho las piernas.

Y para las ojeras es una estupenda planta, ya que mejora la circulación, deshincha la ojera, borra esa mancha negra de debajo del ojo y reduce visiblemente la bolsa (aplicar con cuidado y con constancia).

Una pega que podríamos sacar a esta planta es, que es hepatotoxica, que quiere decir que intoxica el hígado, por lo tanto hay que tener cuidado con su uso, sobre todo si se tienen problemas de hígado, es recomendable  descansar alguna temporada si la usamos mucho (consultar con un experto si se tienen dudas o si no se conoce lo que se hace) prohibidísimo en embarazadas y lactancia.