Esta semana santa se presenta calurosa y seguro que has hecho planes y vas a pasar unos días a la playa pero aunque no sea verano tenemos que saber que hay que ponerse las pilas con el cuidado de la piel. El sol nos da un color más saludable, pero a la vez conlleva peligros variados para la misma como sequedad, manchas,… Para evitar que nuestra piel resulte dañada, debemos darle unos cuidados que enumeramos a continuación:
- Mantener la piel limpia e hidratada. Lo ideal sería que usásemos jabones suaves, sin perfumes pero que ayuden a eliminar la grasa y la suciedad. Además debemos utilizar esponjas y toallas que no raspen nuestra piel.
- Además es de vital importancia usar cremas o aceites hidratantes que nos permitan recuperar la humedad perdida y evitar la sequedad.
- Hay que prestarle atención también a la ropa que llevamos, debe traspirar para evitar la proliferación de hongos por la humedad.
- Dormir bien también es importante, ya que las células se producen y regeneran mientras dormimos.
- En temporada de calor es recomendable moderar el consumo de carnes y comer más frutas y verduras. La vitamina E, contenida en los frutos secos, los pescados y muchos vegetales, previene la degeneración celular y ayuda a regenerarla.
- Como todos sabemos, se recomienda reducir al mínimo la exposición al sol en las horas centrales del día.
- Es imprescindible usar protección solar. Se recomienda usar como mínimo una protección con 15 FPS, y que se aplique unos 30 minutos antes de la exposición al sol.
- Después de la exposición al sol o al agua con cloro, es conveniente darse una ducha.
