A continuación te compartiremos el mejor método para quitar la manicura semipermanente sin dañar las uñas. Sabemos que muchas veces sientes la tentación de arrancar o morder la manicura, pero eso no es recomendable.
Ten en cuenta que cuanto arrancas el esmalte de tus uñas de forma incorrecta, también desprendes capas de la piel debajo de las uñas. Todo ello deja tus uñas susceptibles a romperse fácilmente.
¿Cuál es la mejor forma de quitar la manicura semipermanente sin dañar las uñas?
La buena noticia es que no tienes que ir a un salón de belleza para quitarte la manicura semipermanente, ya que puedes hacerlo tú misma en casa. Sin embargo, el método ideal para quitar el esmalte de manera segura requiere un poco de paciencia y esfuerzo.
Si lo haces correctamente, te aseguras de mantener tus uñas saludables. Veamos entonces, cómo quitar la manicura semipermanente sin dañar las uñas:
Antes que nada, consigue todo lo necesario
Para eliminar la manicura semipermanente de forma segura y sin dañar tus uñas, es indispensable que utilices las herramientas adecuadas. En este caso necesitarás una lima de uñas, así como un acondicionador de uñas y cutícula, de preferencia con aceite solar.
También debes conseguir un removedor de esmalte y laca de uñas, y por supuesto, bolas de algodón.
Elige un área bien ventilada en tu hogar
Debido a que necesitas suficiente tiempo para el proceso de eliminación, es muy importante que lo hagas en un ambiente bien ventilado para evitar respirar la acetona.
Ten en cuenta que no puedes realizar todo el proceso rápidamente. En la mayoría de los casos, quitar la manicura semipermanente tarda alrededor de 30 minutos.
Elimina la capa superior de la manicura con la lima de uñas
Comienza por eliminar la capa superior del esmalte, antes de utilizar el removedor. Para ello te recomendamos utilizar una lima de uñas gruesa, preferiblemente 180/180.
Utiliza la lima lenta y suavemente sobre la capa superior de esmalte, pero asegúrate de no eliminar completamente el esmalte. Hazlo despacio, ya que lo que se busca es desbastar la capa superior.
En otras palabras, solo debes deshacerte del brillo.
Protege la piel de tus uñas y la cutícula
Después de limar ligeramente tus uñas, aplica un aceite para cutículas o una crema espesa en la piel alrededor de las uñas y las yemas de los dedos. De esta manera protegerás tus uñas y la cutícula de la acetona, que es bastante dañina para la piel.
Utiliza tu acondicionador de uñas y cutículas favorito, así como un sérum para cutículas de buena calidad.
Remoja las bolas de algodón con acetona
En este paso solo tienes que empapar las yemas de tus dedos con acetona para eliminar con éxito la manicura semipermanente. Puedes usar una bola de algodón empapada en acetona en cada uña, o acetona y unas gotas de aceite para cutículas.
Las bolas de algodón son tu mejor opción, ya que son más parecidas al tamaño y la forma de las uñas. Además, las bolas de algodón son más capaces de retener la acetona mientras se remojan las uñas. No uses almohadillas de algodón ya que pueden secarse pronto después de absorber la acetona.
Utiliza papel aluminio para envolver tus uñas
Coloca una bola de algodón empapada de acetona sobre tus uñas, y envuelve con papel aluminio para que se mantenga en su lugar. Luego de 10 a 15 minutos, comprueba el progreso.
Después que toda la manicura se haya eliminado, retira el papel aluminio, y aplica un poco de presión sobre la uña con la bola de algodón.
Hidrata tus uñas
El paso final en el proceso para quitar la manicura semipermanente sin dañar las uñas es la hidratación. Para ello remoja tus uñas en aceite de coco durante al menos cinco minutos. Después aplica el aceite para cutículas.
