La parafina se utiliza cada vez más en tratamientos cosméticos y estéticos. Su unión a esencias e ingredientes beneficiosos para la piel la han convertido en un tratamiento clave en cuanto a hidratación y rejuvenecimiento.
Mascarillas faciales de parafina
Los tratamientos faciales con parafina recuperan la hidratación de la zona, potenciando el rejuvenecimiento y el brillo de la piel.
La parafina se aplica con una brocha teniendo mucho cuidado en las zonas sensibles como los ojos. Se aplican tantas capas como sean necesarias y, tras 20 minutos, se retira.
Es fundamental que este tratamiento lo realice un profesional, no puede hacerse en casa.
Masajes con parafina
La parafina caliente en estado líquido nos permite trabajar con ella aplicándola sobre la zona a tratar y se acompaña con un masaje para activar la circulación.
Después se aplican mantas térmicas para estimular la transpiración y la eliminación de toxinas. Pasado el tiempo, se retira la parafina y se aplica frío para provocar una vasoconstricción. Por último, se aplica una crema reductora para potenciar el resultado.
Este tipo de masajes son muy útiles para tratamientos liporeductores, anticelulíticos o detox, ya que desintoxicamos el cuerpo haciéndolo sudar.
Parafina en manicura y pedicura
La parafina también es muy útil en manicuras y pedicuras. Después de masajear manos y pies con una buena crema se aplica la parafina y nos ayuda a hidratar y nutrir las manos y los pies más castigados, dejando atrás la sequedad, las grietas y los signos de envejecimiento tan comunes tanto en manos como en pies.
Es aconsejable usar manoplas y patucos de textura de rizo para cubrir bien las zonas. Esto ayuda a que el calor se mantenga mejor y aporta comodidad durante el tiempo de espera.
Parafina en Fisioterapia
Otro uso común de la parafina es en fisioterapia para hacer masajes de recuperación muscular. El calor de la parafina consigue relajar el músculo dañado y reducir el dolor. Es importante que este tratamiento se realice en una consulta y de la mano de un fisioterapeuta.
Parafina enriquecida
En estética estas parafinas se han enriquecido con principios activos específicos, como pueden ser el aloe vera, la rosa mosqueta o las algas, que además de poner la parafina en nuestro cuerpo incrementan la acción específica de la misma. Por ejemplo, para una piel muy seca y desvitalizada podemos aplicar parafina con rosa mosqueta que además de ayudarnos en la absorción de la crema, la nutrición y la hidratación de la piel tenemos la rosa mosqueta que regenera, estimula y trata más profundamente la piel.
Para tratamientos liporeductores utilizaremos las parafinas con algas y para pieles con eczema o problemas de piel la parafina con aloe vera.